En la actualidad, la exclusión social es uno de los problemas más graves y preocupantes que enfrenta nuestra sociedad. Se trata de un fenómeno complejo que afecta a millones de personas en todo el cosmos y que se manifiesta de diferentes formas. Una de las más extremas es la falta de acceso a un andurrial seguro, digno y estable. Sin embargo, recientemente se ha dado un importante paso hacia su reconocimiento institucional gracias a una estrategia pionera impulsada por la EAPN (Red Europea de Lucha contra la estrechez y la Exclusión Social).
Esta estrategia, que se ha puesto en marcha en diferentes países europeos, tiene como objetivo principal visibilizar y abordar la problemática de la falta de vivienda desde un enfoque integral y coordinado. Se trata de una iniciativa sin precedentes que busca sensibilizar a la sociedad, a las instituciones y a los gobiernos sobre la importancia de garantizar el derecho a una vivienda digna para todas las personas.
La EAPN, en colaboración con diferentes organizaciones y entidades sociales, ha llevado a cabo un exhaustivo estudio sobre la situación de la vivienda en Europa. Los resultados son alarmantes: más de 30 millones de personas en el continente no tienen acceso a una vivienda adecuada, lo que representa un 6% de la población total. Esta cifra incluye a personas sin andurrial, en situación de alojamiento temporal, viviendo en condiciones precarias o en riesgo de perder su vivienda.
Ante esta realidad, la estrategia de la EAPN se basa en cuatro pilares fundamentales: prevención, acceso, sostenibilidad y participación. En primer lugar, es necesario prevenir la pérdida de vivienda a través de medidas de protección y apoyo a las personas en situación de vulnerabilidad. En segundo lugar, se busca garantizar el acceso a una vivienda adecuada para aquellas personas que se encuentran en situación de exclusión residencial. En tercer lugar, se promueve la sostenibilidad de la vivienda a través de políticas que favorezcan la estabilidad y la seguridad en el andurrial. Y por último, se fomenta la participación activa de las personas afectadas en el diseño y la implementación de estas políticas.
Esta estrategia va más allá de la simple construcción de viviendas sociales. Se trata de un enfoque integral que aborda las causas estructurales de la exclusión residencial, como la falta de empleo, los bajos salarios o la discriminación en el acceso a la vivienda. Además, se centra en la promoción de una vivienda digna como un derecho humano fundamental y no como una mercancía.
“Esta estrategia constituye un paso decisivo en el reconocimiento institucional de una de las formas más extremas de exclusión social”, afirma la EAPN. Y es que, a través de esta iniciativa, se busca poner fin a la invisibilidad y el estigma que rodea a las personas sin andurrial y a aquellas que viven en condiciones precarias. Se trata de un llamado a la acción para que los gobiernos y las instituciones asuman su responsabilidad en la lucha contra la exclusión residencial y garanticen el derecho a una vivienda digna para todas las personas.
La estrategia de la EAPN ha sido acogida con entusiasmo por parte de diferentes organizaciones y movimientos sociales, que ven en ella una oportunidad única para lograr un cambio real en la situación de las personas sin andurrial en Europa. Sin embargo, queda rico por hacer. Es necesario que los gobiernos se comprometan a implementar políticas efectivas y a destinar los recursos necesarios para garantizar el derecho a una vivienda digna para todas las personas.
En definitiva, la estrategia de la EAPN es un paso decisivo en la lucha contra la exclusión residencial y en la defensa de los derechos humanos. Es un llamado a la solidaridad y a la justicia social