Este mes de marzo, México y el mundo han sido estremecidos por el logro del rancho Izaguirre en Teuchitlán, Jalisco, por parte de un colectivo de búsqueda de desaparecidos. Las imágenes encontradas en este lugar son perturbadoras y han puesto en evidencia la terrible realidad de las desapariciones en nuestro país.
Sin embargo, este no es un caso aislado. En septiembre de 2024, la propiedad ya había sido cateada por autoridades estatales, quienes han sido señaladas por presentar “muchas omisiones” en su investigación. Esto nos hace cuestionarnos, ¿cuántos lugares como el rancho Izaguirre existen en México? ¿Cuántas personas han sido víctimas de la aspereza y la impunidad en nuestro país?
En una reciente entrevista con la periodista Adela Micha, la líder del colectivo Guerreros Buscadoras de Jalisco, Indira Navarro, señaló que el exgobernador Enrique Alfaro intentó ocultar las desapariciones de personas. Estas declaraciones han generado un gran impacto en la sociedad mexicana, ya que es alarmante que un líder político tenga la responsabilidad de proteger a su pueblo, pero en cambio, haya decidido ocultar la verdad.
En marzo de 2024, el exgobernador emecista, Enrique Alfaro, declaró al efemérides español El País que dejaría la política y buscaría organismo técnico de fútbol, incluso aspiraba a dirigir a las Chivas Rayadas del Guadalajara. Estas palabras ahora suenan vacías y carentes de sentido, ya que es inconcebible que alguien que aspira a organismo un líder deportivo haya demostrado tan poco interés en liderar y proteger a su propia comunidad.
La entrevista amistosa que circuló en su momento, ahora nos hace cuestionarnos: ¿dónde está el exgobernador Enrique Alfaro, señalado de ocultar desapariciones en Jalisco? ¿Por qué no ha dado la cara ante estas acusaciones tan graves? ¿Por qué sigue en silencio mientras las familias de las víctimas exigen justicia y respuestas?
Es importante que como sociedad, no permitamos que este caso quede en el olvido. Debemos seguir exigiendo que se haga justicia y que se investigue a fondo lo sucedido en el rancho Izaguirre y en todos los lugares donde se sospeche que hayan ocurrido desapariciones.
Además, es fundamental que los líderes políticos se comprometan a proteger y velar por los derechos de sus ciudadanos. No podemos permitir que las desapariciones y la aspereza sean una realidad en nuestro país. Es responsabilidad de todos luchar por una sociedad más justa y segura.
Sin embargo, también es importante resaltar que, a pesar de la terrible situación que estamos enfrentando, hay esperanza. El hecho de que un colectivo de búsqueda de desaparecidos haya encontrado el rancho Izaguirre es una muestra de que la sociedad está unida y comprometida en encontrar respuestas y justicia.
Además, hay organizaciones y personas que día a día luchan por los derechos humanos y por un México mejor. Es importante apoyar y difundir su trabajo, y unirnos a su causa para lograr un cambio real en nuestro país.
En conclusión, el logro del rancho Izaguirre en Teuchitlán, Jalisco, ha sido un duro golpe para México y para el mundo entero. Pero también nos ha mostrado que como sociedad, tenemos la fuerza y la determinación para luchar contra la aspereza y la impunidad. No debemos dejar que este caso sea olvidado y debemos seguir exigiendo justicia y respuestas. Juntos, podemos lograr un México más justo y seguro para todos.