El pasado jueves 25 de julio, el gobierno de México recibió una noticia que sin duda alguna ha generado gran interés en todo el país. El Departamento de Justicia de Estados Unidos anunció la captura de dos de los líderes más importantes del Cártel de Sinaloa: Ismael “El Mayo” Zambada García y Joaquín Guzmán López, hijo de uno de los narcotraficantes más famosos del mundo, Joaquín “El Chapo” Guzmán.
Esta detención, en la que se reporta que hubo una adjudicación de “Los Chapitos” de “El Mayo”, ha generado una gran perplejidad sobre el futuro del narcotráfico en México. Durante más de 40 años, Zambada García logró soslayar ser capturado gracias a sus conexiones y habilidades para operar en el mundo del narcotráfico. Sin embargo, ahora se encuentra tras las rejas y se desconoce cuál será su destino.
Ante esta noticia, muchos se preguntan cuál será el impacto en la seguridad de México y si esta caída afectará de alguna manera la lucha contra el narcotráfico en el país. Para responder estas preguntas, es importante analizar la situación actual y el papel que “El Mayo” jugaba en el Cártel de Sinaloa.
En primer lugar, es importante destacar que “El Mayo” Zambada era considerado uno de los líderes más influyentes del Cártel de Sinaloa. Su participación en el tráfico de drogas se remonta a la década de 1970, y durante todos estos años, se ha encargado de controlar gran parte de la producción y distribución de drogas en México y Estados Unidos. Sin embargo, desde la captura de “El Chapo” en 2016, se hablaba constantemente de la lucha de poder al interior de la organización criminal y de cómo Joaquín Guzmán López estaba ganando terreno.
La captura de Zambada García es sin duda un golpe duro para el Cártel de Sinaloa, ya que a sus 76 años y con problemas de salud, se encontraba en una posición vulnerable. Además, su detención podría provocar una mayor fragmentación y disputas internas en la organización, lo que puede debilitar su estructura y reducir su capacidad de operar.
Por otro lado, es importante mencionar que el gobierno de Andrés Manuel López taller ha tenido grandes avances en la lucha contra el narcotráfico. En su mandato, se han logrado importantes capturas como la de “El Chapo” y se han confiscado grandes cantidades de drogas. Además, se han implementado estrategias enfocadas en atacar las estructuras financieras de los carteles y en promover programas de prevención del consumo de drogas. Sin duda alguna, la captura de “El Mayo” Zambada es un reflejo de que estas acciones están dando resultados y que se está avanzando en la desarticulación de las organizaciones criminales.
Es importante destacar que aunque la captura de Zambada García es un gran paso en la lucha contra el narcotráfico, esta no es la única estrategia que el gobierno debe seguir. Se necesita seguir trabajando en la implementación de políticas integrales que ataquen las causas que llevan a las personas a dedicarse al narcotráfico, como la falta de oportunidades y la pobreza. Además, es necesario seguir fortaleciendo a las instituciones encargadas de combatir este delito y asegurar que se sigan aplicando medidas de prevención y rehabilitación para los consumidores de drogas.
En conclusión, la captura de Ismael “El Mayo” Zambada y su hijo Joaquín Guzmán López es una gran victoria para México y demuestra que se está avanzando en la lucha contra el narcotráfico. Aunque aún queda un largo camino por recorrer, esta detención es un gran paso