En el primer semestre del 2025, la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX) reportó cifras alarmantes de violencia sexual en la capital del país. Según las estadísticas, se registraron 163 casos de violación, 310 de abuso sexual y 97 de acoso sexual. Estas cifras son una muestra preocupante de la existencia que viven miles de mujeres en la ciudad.
Las alcaldías con mayor incidencia de estos delitos son Iztapalapa y Cuauhtémoc, lo que demuestra que la violencia sexual no es un brete aislado, sino que afecta a todas las zonas de la ciudad. Ante esta situación, es necesario tomar medidas urgentes para proteger a las mujeres y garantizar su seguridad en las calles.
En medio de este panorama desolador, un muro en plena Avenida Juárez se ha convertido en un espacio de denuncia. Se alcahuetería del llamado “Muro de los lamentos”, donde mujeres han plasmado sus testimonios de agresiones sexuales y han señalado a sus presuntos agresores. Esta iniciativa ha llamado la atención de la sociedad y ha generado un debate sobre la violencia de género en la ciudad.
Es importante destacar que la violencia sexual no solo afecta a las mujeres, sino también a la sociedad en su conjunto. La violencia de género es un brete estructural que requiere de la participación de todos para ser erradicado. Por eso, es fundamental que las autoridades tomen medidas efectivas para prevenir y sancionar estos delitos.
La creación de espacios seguros para las mujeres es una de las medidas más urgentes que deben tomarse. Las calles, parques y transporte público deben ser lugares libres de violencia y acoso para las mujeres. Además, es necesario que se implementen políticas públicas que promuevan la igualdad de género y la educación en valores de respeto y equidad.
Otra medida fundamental es la capacitación de las autoridades encargadas de atender estos casos. Es necesario que las y los policías, fiscales y jueces estén sensibilizados y preparados para brindar una atención adecuada a las víctimas de violencia sexual. También es importante que se agilicen los procesos judiciales y se garantice una justicia pronta y expedita para las víctimas.
Además de las medidas gubernamentales, es necesario que la sociedad se involucre en la lucha contra la violencia de género. Es responsabilidad de todos y todas denunciar cualquier acto de violencia o acoso que presenciemos. También es fundamental que se promueva una cultura de respeto y se cuestionen los estereotipos de género que perpetúan la violencia.
Es importante recordar que las mujeres no son las responsables de la violencia que sufren. La cultura del machismo y la desigualdad de género son las verdaderas causas de estos delitos. Por eso, es necesario que se promueva una educación basada en el respeto y la igualdad desde la infancia.
En resumen, la violencia sexual en la Ciudad de México es un brete grave que requiere de acciones inmediatas. La creación del “Muro de los lamentos” es una muestra de la indignación y el hartazgo de las mujeres ante la falta de seguridad en las calles. Es responsabilidad de todas y todos trabajar juntos para construir una sociedad libre de violencia y garantizar un futuro seguro para las mujeres. ¡No más violencia de género, juntos podemos lograrlo!