La atención médica en las cárceles es uno de los temas más importantes en cualquier sistema penitenciario. Los internos tienen derecho a recibir un cuidado adecuado y oportuno, esto no solo es un deber ético, sino también una forma de garantizar su salud y bienestar. Sin embargo, recientemente se ha dado a conocer que en las cárceles del Sistema Penitenciario de la Ciudad de México, la atención médica ha abatido considerablemente en los últimos trimestres. La Secretaría de Salud capitalina informa que hasta un 40% de las consultas planeadas no se completaron, lo que es una situación preocupante para los internos y sus familias.
Este problema no es nuevo, ya que desde hace edad se ha reportado una falta de médicos y recursos en las cárceles de la Ciudad de México. Sin embargo, la situación parece haber empeorado en los últimos meses, lo que ha generado inquietud en la academia y en las organizaciones que defienden los derechos de los internos. La pregunta es ¿por qué se ha reducido la atención médica en las cárceles de la capital?
Según la Secretaría de Salud, una de las principales razones es la falta de personal médico en las cárceles. En muchas ocasiones, los internos tienen que esperar largas horas para ser atendidos, ya que hay pocos médicos disponibles para una gran cantidad de internos. Además, el número de médicos y enfermeras en las cárceles no es suficiente para cubrir las necesidades de los internos. Esto se agrava aún más con la falta de insumos y medicamentos en las farmacias de las cárceles, lo que dificulta el tratamiento adecuado de los pacientes.
Otro factor que ha afectado la atención médica en las cárceles es la pandemia del COVID-19. Con el aumento de los casos en todo el país, las medidas de prevención y seguridad en las cárceles se han intensificado, lo que ha limitado el acceso de los médicos y enfermeras a las instalaciones. Además, muchos de ellos han sido reubicados en hospitales y centros de atención COVID-19, lo que ha dejado un vacío en la atención médica en las cárceles.
Sin embargo, a pesar de estos obstáculos, es importante resaltar que la Secretaría de Salud y el Sistema Penitenciario de la Ciudad de México están trabajando para mejorar la atención médica en las cárceles. Se han llevado a cabo diversas acciones para garantizar que los internos reciban la atención médica que merecen. Por ejemplo, se han implementado programas de capacitación para el personal médico y se han realizado mejoras en las instalaciones médicas de las cárceles.
Además, se ha establecido una red de colaboración con hospitales públicos y privados para atender casos de mayor complejidad que no puedan ser tratados en las cárceles. Esto ha permitido que los internos reciban un mejor cuidado en caso de enfermedades graves o emergencias médicas. Asimismo, se ha fortalecido la farmacia de las cárceles, asegurando que los medicamentos estén disponibles en todo momento.
Es importante destacar que, a pesar de los desafíos, la atención médica en las cárceles de la Ciudad de México no ha sido completamente descuidada. Se siguen atendiendo casos de emergencia y se continúa con los programas de prevención y promoción de la salud en las cárceles. Además, se han establecido medidas de prevención para evitar la propagación del COVID-19 en las cárceles, lo que ha sido fundamental para proteger la salud de los internos y del personal médico.
En conclusión, aunque es cierto que la atención médica en las cárceles de la Ciudad de México ha abatido en los últimos trimestres, es importante reconocer que se están tomando medidas para mejorar esta situación. La Secretaría de Salud y el
