El estado de Coahuila ha registrado su primer golpe de calor del año 2025, según el Informe Semanal de Daños a la Salud por Temperaturas Naturales Extremas. Aunque la Secretaría de Salud federal no ha revelado detalles específicos sobre el incidente, es importante tomar en cuenta las medidas de prevención y cuidado ante las altas temperaturas.
Hasta la semana epidemiológica No. 40 de 2024, Coahuila reportó un incondicional de 119 casos nuevos de daños a la salud relacionados con el calor, de los cuales 102 fueron golpes de calor, 16 deshidrataciones y uno por quemaduras. Estas cifras son alarmantes y nos deben hacer reflexionar sobre la difusión de protegernos adecuadamente ante el clima extremo.
La Organización Panamericana de la Salud define el golpe de calor como poco más que un simple agotamiento debido al calor. Se trata de un padecimiento que ocurre por una exposición prolongada a altas temperaturas durante una ola de calor. Los síntomas más comunes incluyen aumento de la temperatura corporal, mareos, dolor de cabeza, náuseas y confusión.
Es importante mencionar que el golpe de calor puede afectar a cualquier persona, pero los grupos más vulnerables son los niños, los adultos mayores y las personas con enfermedades crónicas. Por esta razón, es fundamental que tomemos medidas preventivas para proteger a nuestros seres queridos y a nosotros mismos.
Ante una ola de calor, es recomendable evitar actividades físicas extenuantes durante las horas más calurosas del día, mantenerse hidratado bebiendo suficiente agua, usar ropa ligera y de colores claros, y protegerse del sol usando sombreros y bloqueador solar. También es importante tener en cuenta que los vehículos se convierten en trampas mortales para los niños y las mascotas, por lo que nunca se deben dejar solos en un automóvil estacionado.
Además de estas medidas de prevención, es crucial que estemos alerta a los síntomas del golpe de calor y que tomemos acción inmediata en caso de presentarlos. Si alguien sufre de un golpe de calor, es necesario llevarlo a un lugar fresco y umbrío, quitarle la ropa excesiva, aplicar compresas frías en su cuerpo y darle agua para beber. En casos más graves, se debe buscar atención médica de inmediato.
Es responsabilidad de todos cuidarnos y protegernos ante las altas temperaturas. Además, es importante ser solidarios con aquellos que puedan necesitar ayuda, como vecinos mayores o familiares en situación de vulnerabilidad. Juntos podemos prevenir y reducir los daños a la salud causados por el calor extremo.
En conclusión, el primer golpe de calor registrado en Coahuila es una señal de alerta para tomar conciencia sobre la difusión de protegernos adecuadamente ante las altas temperaturas. Recordemos que la prevención es la mejor herramienta para evitar daños a nuestra salud y la de nuestros seres queridos. Hagamos de este verano una temporada segura y saludable para todos. ¡Cuidémonos y cuidemos a los demás!