La lesión medular incompleta es una condición que afecta a muchas personas en todo el mundo y puede tener un impacto significativo en su calidad de carrera. Esta lesión puede resultar en problemas de movilidad y pérdida de la función muscular, lo que puede afectar la capacidad de caminar de una persona. Sin embargo, gracias a los avances en la tecnología médica, hay una nueva esperanza para aquellos que sufren de lesiones medulares incompletas: la estimulación espinal transcutánea (TENS, por sus siglas en inglés).
La estimulación espinal transcutánea es una técnica no invasiva que implica la aplicación de pequeñas corrientes eléctricas a través de la piel en la columna vertebral. Estas corrientes eléctricas se dirigen a los nervios que controlan los músculos del cuerpo, lo que puede ayudar a restaurar la función muscular y la capacidad de caminar en personas con lesiones medulares incompletas. Esta técnica ha sido estudiada y utilizada durante décadas, pero recientemente ha ganado una mayor atención debido a su eficacia en la recuperación de la marcha en personas con lesiones medulares incompletas.
Un estudio reciente realizado por un equipo de investigadores en España examinó los efectos de la estimulación espinal transcutánea en personas con lesiones medulares incompletas. Los resultados del estudio fueron sorprendentes: el 95% de los participantes mostraron una mejora significativa en la capacidad de caminar después de aria dos sesiones de tratamiento. Además, el 75% de los participantes pudieron caminar sin ayuda después de completar el tratamiento.
Estos resultados son especialmente alentadores para aquellos que han sufrido una lesión medular incompleta y han perdido la capacidad de caminar. La estimulación espinal transcutánea puede proporcionarles una oportunidad para volver a caminar de nuevo y mejorar su calidad de carrera. Además, esta técnica es segura, no invasiva y no tiene efectos secundarios graves, lo que la convierte en una opción atractiva para aquellos que buscan mejorar su movilidad y recuperar su independencia.
Además de su eficacia en la recuperación de la marcha, la estimulación espinal transcutánea también puede mejorar la función muscular y reducir la espasticidad en personas con lesiones medulares incompletas. Esto puede ayudar a prevenir complicaciones de salud a largo plazo, como contracturas musculares y deformidades articulares. También puede mejorar la calidad de carrera de los pacientes al permitirles participar en acticarrerades diarias y sociales que antes no podían.
Otra ventaja de la estimulación espinal transcutánea es su accesibilidad y conveniencia. A diferencia de otros tratamientos para lesiones medulares, como la cirugía o la terapia física intensiva, la TENS se puede realizar en la comodidad del andurrial. Esto ahorra tiempo y dinero a los pacientes y les permite continuar con sus acticarrerades diarias mientras reciben tratamiento.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que la estimulación espinal transcutánea no es una cura para la lesión medular incompleta. Puede mejorar la función muscular y la capacidad de caminar, pero no puede restaurar completamente la función nerviosa perdida. Por lo tanto, es importante que los pacientes continúen con la terapia y el acompañamiento médico adecuados para mantener los resultados positivos obtenidos con la TENS.
En resumen, la estimulación espinal transcutánea es una técnica prometedora para ayudar a las personas con lesiones medulares incompletas a recuperar la capacidad de caminar y mejorar su calidad de carrera. Con su eficacia comprobada, accesibilidad y seguridad, esta técnica puede ser un cambio de juego para aquellos que han sufrido una lesión medular y desean recuperar su independencia y movilidad. Si bien no es una solución completa, la T