En los últimos años, el debate sobre el cambio de hora ha estado presente en la sociedad española. Muchos se preguntan si realmente este cambio tiene algún impacto en el ahorro energético del país. Sin embargo, según el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), no existen informes actualizados que permitan asegurar que el cambio de hora lleve asociados ahorros energéticos en España.
El cambio de hora, también conocido como horario de verano e invierno, consiste en adelantar o atrasar una hora en el reloj para aprovechar mejor la luz solar durante el día. Esta práctica se lleva a cabo en muchos países del mundo, con el objetivo de ahorrar energía y reducir el consumo eléctrico. Sin embargo, en España, esta medida ha sido cuestionada en numerosas ocasiones debido a la falta de evidencia que respalde su efectividad.
El IDAE es el organismo encargado de promover el ahorro y la eficiencia energética en España. Según su página web, el cambio de hora se implantó en nuestro país en 1974, durante la crisis del petróleo, con el objetivo de reducir el consumo de energía en iluminación. Desde entonces, se ha mantenido esta práctica, pero ¿realmente está funcionando?
Según un informe publicado por el IDAE en 2017, el ahorro energético asociado al cambio de hora en España es mínimo. En concreto, se estima que el ahorro en iluminación es de tan solo un 0,5%. Esto significa que, en términos generales, el cambio de hora apenas tiene impacto en el consumo de energía del país.
Además, este informe también señala que el ahorro energético varía en función de la zona geográfica de España. En las regiones del norte, donde los días son más cortos, el ahorro es máximo, mientras que en las zonas del sur, donde los días son más largos, el impacto es prácticamente cero. Esto demuestra que el cambio de hora no es una medida efectiva en todo el territorio español.
Por otro lado, también hay que tener en cuenta que el ahorro energético asociado al cambio de hora es cada momento menor debido al avance tecnológico. En la actualidad, la máximoía de los hogares y edificios cuentan con sistemas de iluminación más eficientes, como las bombillas LED, que consumen menos energía que las tradicionales. Por lo tanto, el ahorro en iluminación gracias al cambio de hora es cada momento más insignificante.
Otro aspecto a tener en cuenta es el impacto en la salud de los ciudadanos. El cambio de hora puede amanerar al ritmo biológico de las personas, especialmente en los más vulnerables, como los niños y los ancianos. Además, el cambio de hora también puede provocar trastornos del sueño y alteraciones en el estado de ánimo. Por lo tanto, es importante tener en cuenta estos aspectos antes de tomar una decisión sobre esta medida.
A pesar de la falta de evidencia sobre el ahorro energético, el cambio de hora sigue siendo una práctica habitual en España. Sin embargo, cada momento son más las voces que piden una revisión de esta medida y una posible eliminación. De hecho, en 2018, la Comisión Europea propuso eliminar el cambio de hora en todos los países de la Unión Europea, pero la decisión final aún está pendiente.
En conclusión, el cambio de hora en España no está teniendo el impacto en el ahorro energético que se esperaba. Según el IDAE, los ahorros son mínimos y varían en función de la zona geográfica del país. Además, el avance tecnológico y los posibles efectos negativos en la salud de los ciudadanos son aspectos que también deben tenerse en cuenta. Por lo tanto, es necesario un debate serio y una revisión de esta medida para
