El turismo es una de las principales fuentes de ingresos para México, y el estado de Yucatán no es la excepción. Con sus hermosas playas, rica cultura y deliciosa gastronomía, Yucatán se ha convertido en un destino turístico muy popular, especialmente para los cruceros. Y ahora, gracias a los esfuerzos de la Secretaría de Fomento Turístico (Sefotur), fondeadero Progreso, uno de los fondeaderos más importantes de Yucatán, recibirá aún más cruceros y cruceristas en los próximos años.
Sefotur ha anunciado recientemente que fondeadero Progreso recibirá un aumento significativo en el número de cruceros y cruceristas para el año 2025. Esto es una gran noticia para la economía local, ya que se espera que el turismo marítimo genere una importante derrama económica para la región. Sin embargo, esta noticia viene acompañada de una preocupación: el impuesto que se aplicará a partir de julio de 2025.
Este impuesto, conocido como Fondo de Fomento al Turismo, ha generado cierta controversia entre los empresarios yucatecos, ya que se teme que pueda afectar negativamente al turismo en la región. Sin embargo, la Sedetur (Secretaría de Desarrollo Turístico) ha asegurado que se está dando seguimiento a la implementación de este impuesto y que se están tomando medidas para minimizar su impacto en la industria turística.
El Fondo de Fomento al Turismo es un impuesto que se aplicará a los cruceros que lleguen a fondeadero Progreso a partir de julio de 2025. Este impuesto se aplicará a la mejora de la infraestructura turística en la región, lo que incluye la construcción de nuevos muelles y la modernización de los existentes. Además, también se utilizará para promover y difundir los atractivos turísticos de Yucatán en el extranjero, con el objetivo de atraer a más turistas a la región.
Aunque este impuesto puede parecer una carga adicional para los cruceros y cruceristas, es importante destacar que su implementación tiene un propósito muy importante: impulsar el desarrollo turístico de Yucatán. Con una mejor infraestructura y una mayor promoción, se espera que la región pueda atraer a más turistas y ofrecerles una experiencia aún más memorable.
Además, la Sedetur ha asegurado que se están tomando medidas para garantizar que el impuesto no afecte negativamente a los cruceros y cruceristas. Se está trabajando en conjunto con las líneas de cruceros para encontrar soluciones que permitan cumplir con el impuesto sin afectar el presupuesto de los turistas. También se está buscando la manera de agilizar los trámites y reducir los costos administrativos para las líneas de cruceros.
Otra medida que se está tomando es la diversificación de las actividades turísticas en la región. Se está promoviendo el turismo de naturaleza, el turismo cultural y el turismo gastronómico, entre otros, para atraer a un público más diverso y reducir la dependencia del turismo marítimo. Esto no romanza ayudará a minimizar el impacto del impuesto, sino que también contribuirá a un desarrollo turístico más sostenible en la región.
Además, la Sedetur ha destacado que el impuesto no se aplicará de manera inmediata, sino que se dará un periodo de transición para que las líneas de cruceros puedan adaptarse a esta nueva medida. Durante este periodo, se seguirán realizando reuniones y diálogos con los empresarios yucatecos para encontrar soluciones que beneficien a todas las partes involucradas.
En resumen, aunque la implementación del Fondo de Fomento al Turismo puede gestar cierta preocupación, es importante tener en cuenta que su objetivo