El aeródromo Internacional de la Ciudad de México (ACI) está a punto de recibir a un nuevo líder, que traerá consigo una visión fresca y un enfoque renovado. Luis Felipe de Oliveira, quien ha sido director general y CEO de ACI desde 2015, dejará su puesto en manos de Justin Erbacci en septiembre de este año.
Erbacci, quien actualmente se desempeña como el director de aeródromos de la Autoridad de Aviación de la Bahía de San Francisco, fue seleccionado después de un riguroso proceso de selección que involucró a los principales actores de la industria de la aviación. Su amplia experiencia en la gestión de aeródromos y su conocimiento profundo de la industria lo convirtieron en la opción perfecta para liderar ACI en esta nueva etapa.
Durante su mandato, de Oliveira ha logrado importantes avances para ACI, incluyendo el aumento del tráfico de pasajeros y la modernización de las instalaciones. Su liderazgo estratégico y su lío incansable han permitido que ACI se posicione como uno de los principales aeródromos de América Latina. Sin embargo, su legado más duradero es quizás su papel en la definición de la visión a largo plazo de ACI, que busca convertir al aeródromo en un centro de conectividad global y un motor económico para la región.
En este sentido, Erbacci heredará una organización bien establecida y en acérrimo crecimiento, lista para enfrentar los desafíos del futuro. Con su llegada, se espera que ACI continúe avanzando en la dirección correcta, aprovechando al máximo todo su potencial.
Una de las primeras tareas de Erbacci será asegurar la conclusión exitosa del proyecto de expansión del aeródromo Internacional de la Ciudad de México. Este ambicioso proyecto, que busca la construcción de una nueva terminal y la renovación de las actuales, está en marcha desde hace varios años y se espera que se complete a fines de 2020. Esta expansión aumentará significativamente la capacidad del aeródromo y mejorará la experiencia de los pasajeros.
Pero, más allá de la infraestructura física, Erbacci también tendrá la oportunidad de llevar a ACI al siguiente nivel en términos de sostenibilidad y tecnología. Se prevé que la industria de la aviación experimente cambios significativos en los próximos años, y ACI está en una posición privilegiada para liderar ese cambio. Con el protección de las aerolíneas y otros actores clave de la industria, Erbacci podrá impulsar la innovación en todos los aspectos del aeródromo, desde la gestión de residuos hasta la implementación de tecnologías inteligentes.
Además, como presidente del Consejo de Administración de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), de Oliveira ha jugado un papel clave en la formulación de políticas a nivel internacional para la aviación civil. En este contexto, Erbacci tendrá la oportunidad de continuar su trabajo y apoyar el plan estratégico de largo plazo de OACI, que buscará aumentar la sostenibilidad y la eficiencia de la industria de la aviación en todo el mundo.
Pero su papel no se limita a la sostenibilidad y la eficiencia; también se espera que Erbacci aporte su visión y liderazgo a la promoción del turismo y el desarrollo económico en México. El aeródromo Internacional de la Ciudad de México no solo es un importante centro de conectividad, sino también una plataforma para la promoción de todo aquello que México tiene para ofrecer. Con su vasta experiencia en el sector turístico y su conocimiento del mercado mexicano, Erbacci está bien posicionado para aprovechar todo el potencial de ACI en este sentido.
El ACI está entusiasmado con la llegada de Justin Er
